Una de las tradiciones más valiosas de Morgan Lo Hizo volvió a vivirse en la edición 43. Por teléfono, en el piso o a través de un audio grabado, los campeones (que fueron varios) dijeron “presente” este lunes en el aire de Conexión Abierta, la radio de la Universidad Abierta Interamericana. Pasemos lista: Bolívar pentacampeón de la Liga Argentina, Club de Amigos vencedor del Abierto Sub 18 Metropolitano en la rama masculina, Ciudad de Buenos Aires y el logro equivalente en la femenina… y todos en Morgan.
Hasta el piso de la calle Humberto Primo se acercaron Leandro Pacheco y Julián Mohr, dos de los “discípulos” de nuestro Germán T. que por primera vez pudo llegar a una final de Abierto. Y encima, ganarla. Será por eso, seguramente, que no sólo volvió a llegar temprano a la cita sino que les dio libre la jornada del lunes a los muchachos. Ellos le retribuyeron trayendo sus experiencias, anécdotas, la historia de su llegada al club de Palermo y hasta sus mil y una cábalas, que van desde camisetas invertidas hasta depilaciones parciales. Todo sea por ganar.
Los dos polifuncionales de Club de Amigos se movieron con soltura en la mesa de Morgan. Y claro, si Mohr va del rol de líbero al de opuesto sin drama y Pacheco es un pegador de 1,98 devenido en armador. La mesa de Morgan, acompañada en esta ocasión por un exquisito y alegórico arrolladito de merluza, cortesía de Magno, no fue inconveniente para ellos, que incluso sortearon el ardid de los periodistas de guardarse la comida para sí mismos.
Las chicas de Ciudad, bicampeonas del Abierto, no descansaron y mantuvieron su cronograma de entrenamientos, y por eso Camila Jersonsky, una de las destacadas del equipo de Núñez en la final, se hizo presente vía telefónica. Para la central, arribada al club en esta temporada, también fue su primer título en el torneo, y compartió su alegría con el aire radial.
Antes, el jueves, Bolívar se dio el gustazo de lograr su quinta corona de Liga, la tercera al hilo, y Morgan se dio paralelamente un lujo igual de reconfortante: ser el único medio presente adentro de los festejos del equipo bonaerense. Entre tanto micro, autobomba, griterío y locura de campeonato, los galardonados fueron pasando uno por uno. Guille García, Javier Filardi, Gabriel Arroyo, Pablo Meana, Rodrigo Aschemacher y Badá pidieron un tiempo técnico (sección ausente a raíz de prepoteadas de un integrante de la mesa) en medio de la alegría y se los pudo escuchar.
La apertura, claro, estuvo a tono, con más voces bolivarenses pos partido y la música de “We Are The Champions” que, aun trillada, sigue poniendo la piel de gallina. Y también hubo lugar para la otra mitad de la historia, la de una heroica Unión de Formosa que peleó de igual a igual, porque Marcos Milinkovic habló por teléfono y declaró que “no pensaba que iba a disfrutar tanto esta Liga”. Sólo una de las tantas frases para rescatar del histórico opuesto nacional, que quiere seguir en el país, aunque todavía no se sabe en qué rol. Morgan lanzó uno de sus típicos pronósticos cargados de riesgo y lo adelantó al rubio como el próximo técnico. ¿Acertará?
Si de pronósticos se trata, todavía queda un campeón por definirse y Morgan siguió el hilo de esa trama: Banco Nación se adelantó en la final de la Liga Femenina ante Boca a pura garra y los protagonistas, grabador mediante, también estuvieron presentes. Faltó el espacio para que Germán T. pudiera revalidar las dos visiones de Víctor T. (ausente en esta ocasión), que anticipó a Bolívar campeón y a Banco emulando esa gloria. No pega los números de la quiniela, pero parece que algo de vóley sabe.
Las dos horas de programa tuvieron todavía un condimento más: Facundo Conte salió vía telefónica desde Italia, ni más ni menos, en las jornadas posteriores al duro descenso del Catania que comparte con su padre y Santiago Orduna. El joven talento, aún dolido, hizo de tripas corazón y ya habló también de lo que se viene en la Selección, de la que será parte. Otro lujo internacional de Morgan.
Y no podemos dejar de lado el Retro, el Metro, el Pequeño Morgan (la intención de seguir la rima fue sólo eso, una intención). El Top Chart de un Fede Pereyra que la sigue rompiendo en España. Todo eso que te trae Morgan. Es que fuimos los primeros. Tenemos la mejor información. Nunca bajamos los brazos. Pará… ¿te lo vas a perder?
Hasta el piso de la calle Humberto Primo se acercaron Leandro Pacheco y Julián Mohr, dos de los “discípulos” de nuestro Germán T. que por primera vez pudo llegar a una final de Abierto. Y encima, ganarla. Será por eso, seguramente, que no sólo volvió a llegar temprano a la cita sino que les dio libre la jornada del lunes a los muchachos. Ellos le retribuyeron trayendo sus experiencias, anécdotas, la historia de su llegada al club de Palermo y hasta sus mil y una cábalas, que van desde camisetas invertidas hasta depilaciones parciales. Todo sea por ganar.
Los dos polifuncionales de Club de Amigos se movieron con soltura en la mesa de Morgan. Y claro, si Mohr va del rol de líbero al de opuesto sin drama y Pacheco es un pegador de 1,98 devenido en armador. La mesa de Morgan, acompañada en esta ocasión por un exquisito y alegórico arrolladito de merluza, cortesía de Magno, no fue inconveniente para ellos, que incluso sortearon el ardid de los periodistas de guardarse la comida para sí mismos.
Las chicas de Ciudad, bicampeonas del Abierto, no descansaron y mantuvieron su cronograma de entrenamientos, y por eso Camila Jersonsky, una de las destacadas del equipo de Núñez en la final, se hizo presente vía telefónica. Para la central, arribada al club en esta temporada, también fue su primer título en el torneo, y compartió su alegría con el aire radial.
Antes, el jueves, Bolívar se dio el gustazo de lograr su quinta corona de Liga, la tercera al hilo, y Morgan se dio paralelamente un lujo igual de reconfortante: ser el único medio presente adentro de los festejos del equipo bonaerense. Entre tanto micro, autobomba, griterío y locura de campeonato, los galardonados fueron pasando uno por uno. Guille García, Javier Filardi, Gabriel Arroyo, Pablo Meana, Rodrigo Aschemacher y Badá pidieron un tiempo técnico (sección ausente a raíz de prepoteadas de un integrante de la mesa) en medio de la alegría y se los pudo escuchar.
La apertura, claro, estuvo a tono, con más voces bolivarenses pos partido y la música de “We Are The Champions” que, aun trillada, sigue poniendo la piel de gallina. Y también hubo lugar para la otra mitad de la historia, la de una heroica Unión de Formosa que peleó de igual a igual, porque Marcos Milinkovic habló por teléfono y declaró que “no pensaba que iba a disfrutar tanto esta Liga”. Sólo una de las tantas frases para rescatar del histórico opuesto nacional, que quiere seguir en el país, aunque todavía no se sabe en qué rol. Morgan lanzó uno de sus típicos pronósticos cargados de riesgo y lo adelantó al rubio como el próximo técnico. ¿Acertará?
Si de pronósticos se trata, todavía queda un campeón por definirse y Morgan siguió el hilo de esa trama: Banco Nación se adelantó en la final de la Liga Femenina ante Boca a pura garra y los protagonistas, grabador mediante, también estuvieron presentes. Faltó el espacio para que Germán T. pudiera revalidar las dos visiones de Víctor T. (ausente en esta ocasión), que anticipó a Bolívar campeón y a Banco emulando esa gloria. No pega los números de la quiniela, pero parece que algo de vóley sabe.
Las dos horas de programa tuvieron todavía un condimento más: Facundo Conte salió vía telefónica desde Italia, ni más ni menos, en las jornadas posteriores al duro descenso del Catania que comparte con su padre y Santiago Orduna. El joven talento, aún dolido, hizo de tripas corazón y ya habló también de lo que se viene en la Selección, de la que será parte. Otro lujo internacional de Morgan.
Y no podemos dejar de lado el Retro, el Metro, el Pequeño Morgan (la intención de seguir la rima fue sólo eso, una intención). El Top Chart de un Fede Pereyra que la sigue rompiendo en España. Todo eso que te trae Morgan. Es que fuimos los primeros. Tenemos la mejor información. Nunca bajamos los brazos. Pará… ¿te lo vas a perder?
Morgan lo escribió
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